L
|
Los sueños, para que puedan comenzar a realizarse deben ponerse en palabras, darse a conocer.
viernes, 8 de junio de 2012
Amor Imprevisto - Capítulo 13
levo
tres meses visitando de forma regular al doctor Chan Zu, sip, Chan, Chan Zu
como en una mala película de Kun Fu. Igualito a un personaje de cine clase B. La
verdad es que las secciones no surten efecto, y creo que es porque paso toda la
sección imaginándolo como partener de Jackie
Chan siendo perseguido por la mafia china. Aunque también se lo podría
confundir con un buda. Creo que le podría tocar su orondo abdomen para que
traiga suerte. Entonces de veras volvería a tener suerte.
Tres
meses atrás decidí venir a velo para hablar de mis problemas. Problemas,
muchos. He descubierto gracias a Chan que tengo muchos, muchos problemas y
mucho de lo que hablar. Increíble no? Lo que es la psicología, capaz de
escarbar hasta en un granito de arena. Lo importante es que aun no he llegado a
hablar del problema fundamental, nunca hasta ahora hable de los Hobbs y de
Rhion en particular. Sinceramente no recordaba que tuviera tantas cosas que
solucionar en mi vida, que hubiera tanto que hablar, o tanto que callar. No se
siempre encuentro algo que decir pero que nunca es sobre ellos, eso no lo puedo
hablar y menos Zaccary.
Mis
sueños siguen, mi mente no se apaga y los fantasmas me persiguen sin descanso.
Por las mañanas aun despierto en sabanas húmedas, con mi cuerpo enredado a la
almohada ansiando liberación. También sueño con cuartos oscuros, cadenas,
látigos y tormentos. Estos últimos tal vez preferibles a los otros. Pero como
hablar de esto, como expresarle a este desconocido, como decirle que de soñar
con la chica de tapa y sus grandes senos, pasé a soñar con un hombre y su gran
pene. Como explicar que no soy gay, como convencer a alguien si no me convenzo
a mí.
– Fabio, he
notado que en las últimas semanas ha bajado de peso, que las ojeras se han
acentuado más. Creo intuir que no nos estamos enfocándonos en el verdadero
problema que lo trajo a este consultorio. – hizo una pausa dramática mientras
consultaba mi expediente - Veo aquí que
usted sufrió un incidente grave mientras estuvo en Londres a principio de año.
Es así? Desea hablar sobre eso?
– Bueno…-
desear como desear hablar de eso no, es mas creo nuca esté preparado,
seguramente me sienta mejor para la extracción de una muela que para eso pero
bueno algo debía decir, no? Aparte Russell pagaba esto debía aprovecharlo. No?
– La verdad es que es algo complicado de hablar.
– Explique,
por favor a que se refiere con eso? Complicado en qué sentido?
Respiré
profundo y medité que versión contar, la de la oficina, la de los Hobbs
contaron al médico, o simplemente la verdad, pero la verdad llevaría a otras
cosas. No sabía que decía el expediente que tenía el médico, pero algo debía decir.
– Complicado
porque no solo me incluye a mi – dije al fin
– Si lo hace
sentir más seguro tal vez debería contarme los hechos, sin nombres ni lugares.
Recuerde que esto es confidencial y tengo la obligación de guardar el secreto
profesional de lo que se dice aquí. Nada de esto quedará asentado en su legajo.
Jajaja!!
Confidencial. Me cuesta creer eso. Miré el vacio minutos largos, ordenando
hechos, detalles que contar que solo me pertenecieran a mí. Luego de un largo
debate con el ocupante desquiciado dentro de mi cerebro, llegue a un acuerdo
sobre lo que narrar y lo que callar.
– Cuando
llegue a Londres el tiempo era gris y húmedo, creo que nunca trabajé en mi vida
tanto como esa semana… Sabía usted que son tres, igualitos, sin una diferencia,
como calcados…Y llovía y las gotas se reflejaban en su cabello rubio… Amanecía
cuando pasó – Abrí la boca y hable y hable, conté verdades en tonos grises,
calle nombres, oculte detalles pero hable y poco a poco sentí que era libre por
fin. O eso creí.
– Bien,
señor Molgante, veo que por fin hemos llegado a la parte que lo mantiene
angustiado. Ha pensado usted en algún momento que el cuerpo reacciona a
estímulos solo a estos y sin que signifiquen nada. Bien piénselo y lo hablamos
en la siguiente sesión
El
día no terminaba más. Cada que miraba el reloj en la pantalla de mi computadora
veía los números pasar con inmensa lentitud. Era como un reloj de arena, donde
la arena nunca terminaba de caer al recipiente inferior.
La
sección con el Dr. Chan ese día había consumido de mí toda mi energía. Para
colmo mi jefe salía de viaje rumbo a Nueva York y parecía el muñequito de
Duracell, como el conejo que nunca se queda sin baterías. No hacía más que
revisar informes y gráficos para la reunión. Por suerte, este viajes no me
tocaba acompañarlo, esa función fue Gabriel Roiseten de marketing y publicidad.
Estaban por contratar a la empresa que se dedicara realizar la compaña del
último gran producto de la empresa. Un producto que nos comunicaría con el
mundo en segundos y desde la palma de la mano.
A
las dos de la tarde me despedí de mi Jefe en la terraza junto al helicóptero, menos
mal que yo debía quedarme a cuidar el fuerte, porque lo único que yo quería era
dormir y dormir una semana seguida. Obvio iba aprovechar la ausencia de Russell
para bajar ritmo y descansar algo. Tenía programados almuerzos más largos, nada
de sándwiches en el escritorio, por supuesto también tenía pensado siestas en
el escritorio a media tarde. Qué lindo sueño… si llegaba hacerse realidad
Y
en eso estaba yo, cuatro horas más tarde, sin Russell, a punto de cumplir mi
sueño de dormir sobre el escritorio cuando fui salvado por la campana o mejor
dicho fui despertado por el teléfono.
– SotfHobbs,
Buenas tardes. Oficina de Russell Hobbs, Molgan habla. – Sip, discurso algo
largo pero sonaba tan bien cuando no se me trababa la lengua.
– Molgan,
eres tú? Por fin…, Soy Rhion, estoy en problemas… esta mi hermano por allí?
Necesito que me saque de la cárcel…
– Rhion? –
no sabia si estaba soñando o que
– Sip,
Rhion, Morlgan, podrías decirle a mi Hermano que me saque de acá.
– Por
Dios? Donde estas?...En la cárcel?... – Creo que me tomo un tiempo reacionar y
no creer que era producto de m imaginación – Mierda!!! Russell salió, está volando rumbo
a una reunión en Nueva York, debe estar en
mitad del viaje,… no lo puedo ubicar hasta que aterrice en unas horas.
– Molgan, se
que las cosas terminaron mal entre los dos pero por favor sácame de aquí, no
quiero pasar la noche en un celda hasta que llames a Russell.
– Dime donde
estas, buscaré un abogado de la empresa e iremos para allá. – fue la única
solución que se me ocurrió.
Así
fue que horas más tarde salimos de la seccional donde Rhion había sido detenido
por manejar de forma imprudente. Exceso de velocidad, falta de casco, casi
atropellar a una anciana, huir de la policía y resistirse al arresto. Una serie
de cargos que pudimos sortear con algo de suerte y la ayuda de uno de los
abogados del departamento legal de la empresa Nos costó una cuantiosa multa que
se pago con la tarjeta negra corporativa de Russell, gasto que deberé explicar
después con detalle, y la suspensión para Rhion de manejar hasta la audiencia
con el juez, ha! Y lo más importante el secuestro de la Harley
El
abogado se despidió de nosotros en la puerta de la seccional y allí quedamos
los dos mirándonos frente a frente, rodeados del fragrante aroma de la
primavera, el aroma dulce del azahar en flor. Como si nos hubiera estado
esperando un presagio la electricidad en el ambiente crujió y el ozono se
acrecentó hasta que sobre nosotros en cielo descargo toda su fuerza.
Empapados
bajo la lluvia, que cada segundo se tornaba más frio, nos miramos a los ojos
embargados por una timidez impropia de dos hombres adultos. Ninguno dijo nada, solo nos miramos hasta que
mi estomago rugió como el monstro de Gonzilla.
No
sé qué fuerza me hizo decirlo, solo lo dije
– Quieres
venir a mi casa? Puedo hacer pastas pasta cenar
--------------------------------
Vereniz.-
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Aviso
Los libros y textos publicados en este blog son sin ánimo de lucro. El único fin es difundir y alentar a la lectura. Los enlaces para descarga han sido extraídos de sitios públicos de internet o donados por otros blogs. Se desconoce si los mismos tienen cedidos los derechos de autor para almacenamiento y descarga. Queda fuera de la responsabilidad del blog el uso que se le dé al material fuera del sitio. Si alguna editorial, autor, entidad, etc, tiene algún inconveniente con los textos publicados en este blog no tienen más que hacerme llegar su solicitud y prontamente tomaré medidas para solucionar el inconveniente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario